Conrado Hernández, secretario general de la UGT-PV, ha clausurado hoy la Escola d'Estiu 2011 donde ha afirmado que el sindicato no es un fin en si mismo, hay que seguir trabajando como desde que esta organización nació, para ser un referente y un agente de cambio social para que ésta sea más justa y mejor desde la convicción de que se puede hacer.

El secretario general de la UGT-PV pronunció un discurso en el que repasó los principales acontecimientos en la socialdemocracia europea desde los años 70 del siglo pasado, cuando la izquierda perdió los referentes y el discurso propio. Como consecuencia de ello, hoy está a la defensiva, o derrotada en toda Europa. Por ello demandó recomponer un discurso coherente para que termine la orfandad de la izquierda.

En un mundo globalizado, es preciso que el sindicalismo se globalice, y para ello tenemos que reforzar la Confederación Europea de Sindicatos, aunque sea a costa de perder soberanía en cada uno de los países. Hay que para los retrocesos de los derechos sociales que se están produciendo al socaire de la globalización, debemos pelear para democratizar la globalización  para mejorar la justicia social en toda Europa y en todo el mundo. Recuperar el vigor del concepto de la solidaridad para cambiar el modelo de sociedad.