El Secretario General de UGT, Cándido Méndez, ha calificado de "vergonzoso" que se tomen determinaciones en Europa, ante las que la inmensa mayoría de las 500 millones de personas que habitan Europa "asisten atónitas y muy preocupadas, acumulando en los últimos tiempos un sentimiento creciente de rencor a Europa". En este sentido, tras denunciar la degradación de la situación económica, social, de empleo y democrática de Europa, ha resaltado que, pese a que se han vivido crisis muy duras, siempre "teníamos una esperanza, que era Europa y ahora esa esperanza nos la está arrebatando".

Méndez, en el homenaje a Pablo Iglesias, ha manifestado sus dudas sobre que "mantengan su autonomía los que dicen que gobiernan Europa", la sra. Merkel y el sr. Sarkozy porque "creo que han renunciado al ejercicio de la política". En este sentido ha señalado que el presidente francés está preocupado sobre todo porque las agencias de calificación le mantengan la triple A y supedita su responsabilidad como gobernante a esos intereses electorales.

Ha resaltado que se están tomando determinaciones en un tono grandilocuente y melodramático, diciendo que es la última oportunidad para la UE y anunciando que ahora han tomado decisiones para tranquilizar a los mercados financieros, para estabilizar el euro, para combatir la crisis económica. "¿Cuántas veces habré oído ahora sí hemos tomado decisiones? Muchas y ¿Cuáles han sido las consecuencias de estas decisiones? Que la primera potencia económica del mundo, el primer destino de las inversiones extranjeras del mundo, el mercado mundial que es Europa, donde hay 500 millones de personas, que es la primera potencia democrática y en términos de cohesión social del mundo, está en estos momentos abocada a una recesión económica".

Méndez ha señalado que UGT no se va resignar a que España sea uno de los soportes para que Alemania tenga "una financiación más barata y para que además seamos el origen de mano de obra supercualificada en esa dirección". Así se lo señaló al próximo presidente del Gobierno en la reunión que mantuvieron la semana pasada y le precisó que "no estamos en una situación parecida, ni por asomo, a la del año 95 o 96. Entonces estábamos saliendo de una crisis económica. Ahora no sólo no salimos de la crisis económica, sino que hay analistas que cada día con más intensidad afirman que podemos estar en esta situación a lo largo de una década".

Ha abogado por cambiar en profundidad el signo de las políticas. Y ha destacado que desde la CES, en el último comité Ejecutivo, en el que ha participado, se ha reflexionado sobre qué propuestas avanzar. "Sería fundamental llegar a un gran acuerdo europeo a favor del crecimiento económico, del empleo, de defender lo más valioso que tiene este viejo continente, que es nuestro patrimonio democrático, y el patrimonio social que representa el estado de bienestar y el modelo social europeo".

Méndez, en referencia a España, ha destacado que incluso para aplicar las políticas que manda la UE hay márgenes que se pueden explorar. Hay que combatir el déficit, pero "hay que saber leer porqué tenemos el déficit que tenemos en este país. No es por un exceso de gasto. Es por una caída brutal de los ingresos". En nuestro país es necesaria una reforma fiscal para recuperar recaudación para poder financiar nuestras necesidades básicas como ciudadanos, tener acceso a la sanidad y educación públicas, que no son gratis. Las pagamos con impuestos.