VALÈNCIA. Stadler Valencia

 y su Comité de empresa han firmado, con año y medio de retraso, el ansiado convenio laboral que perseguían los más de 860 trabajadoras/es de la fábrica de trenes y locomotoras de Albuixech (de ell@s solo media Plantilla afectada directamente). La paz social firmada por ambas partes encarrilada a principios de este mes, como informó este diario se extenderá hasta el año 2022, lo que convertirá el acuerdo en uno de los más extensos de la industria valenciana al abarcar 6 años desde 2017, fecha en la que se establece su inicio de forma retroactiva.

Así lo detallan fuentes del comité de empresa consultadas por Valencia Plaza, que subrayan al respecto que una de las principales ventajas del acuerdo, la subida de los salarios en función del IPC real, se les aplicará, en consecuencia, de forma retroactiva desde enero de 2017. Se trata de uno de los mayores logros del convenio, máxime si se tiene en cuenta que la empresa inició las negociaciones proponiendo un recorte de sueldos.

Otras de las ventajas logradas son el incremento en 100 euros mensuales para el segundo escalón salarial de la compañía o la garantía de 20 contratos fijos anuales mediante contratos de relevo por prejubilaciones, lo que supondrá entre 100 y 110 nuevos contratos fijos a lo largo del convenio.

Stadler, en un comunicado, ha celebrado el acuerdo alcanzado. "Tras meses de negociación no exentos de momentos de dificultad, la empresa y los trabajadores han llegado a un acuerdo para firmar un nuevo Convenio Colectivo hasta 2022 cuyos aspectos más relevantes son el mantenimiento del empleo fijo y de la jornada de trabajo con mayores medidas de flexibilidad, garantía del poder adquisitivo, reducción de las diferencias salariales del personal con menores ingresos y rejuvenecimiento de la plantilla mediante el Contrato de Relevo".

Según Stadler Valencia, "el convenio colectivo ofrece un marco estable laboral para el personal de Stadler Valencia que se caracteriza por su firme compromiso de mantener la empleabilidad fabricando vehículos ferroviarios en Valencia para todo el mundo, evitando la deslocalización de su producción gracias a una decidida apuesta por la investigación tecnológica y la innovación".

Según ha agregado la industria valenciana, "el acuerdo asegura la competitividad de la empresa en un momento crucial para los fabricantes de material rodante como consecuencia de los repetidos anuncios de renovación de las flotas de servicios regionales y cercanías tras muchos años con apenas inversión como consecuencia de la crisis económica", así como también alivia "la necesidad de resolver los problemas derivados de la movilidad urbana en las grandes ciudades en los cinco continentes".